[vc_row][vc_column][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column offset=”vc_col-lg-offset-2 vc_col-lg-8 vc_col-md-offset-1 vc_col-md-10″][la_heading title_fz=”lg:46px;md:36px;sm:30px;xs:24px;” title_class=”three-font-family font-weight-400″ title=”¿Sabías que el AOVE es un aliado del sistema hormonal femenino?”]
Descubre los principales beneficios de las grasas saludables con Verónica Estiguin
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Veronica Estiguin es una dietista-nutricionista y entrenadora personal que arrasa en las redes sociales. Sus conocimientos sobre la nutrición deportiva y el sistema hormonal de la mujer le han llevado a conquistar a sus más de 137k seguidores. Desde Verde Esmeralda Olive hemos querido aprender con ella y escuchar algunos de sus consejos.
Tras periodos festivos, las personas tienden a hacer dietas estrictas para perder esos kg cogidos. ¿Por qué es tan perjudicial este tipo de dietas?
Este tipo de dietas son tan perjudiciales porque suelen tener falta de muchos nutrientes, además de los minerales y vitaminas. Son dietas hipocalóricas que tanto a corto como a largo plazo, pueden crear patologías y desequilibrios hormonales. Estas dietas no están pautadas ni individualizadas, por lo que no tienen en cuenta el estado de la persona ni los alimentos que le gustan. Si no se prepara el plan nutricional de manera específica, como el entrenamiento, no va a crear adherencia. Normalmente, en las dietas de pérdida de peso, se pierde peso muy rápido (que no grasa), y al no estar preparadas para ti, te acabas cansando, lo dejas y vuelves a comer como comías.
Estas dietas suelen quitarte algún macronutriente, por ello te dejan sin energía. Las mujeres, por sus hormonas, deberían llevar una dieta específica y pautada. A nuestras clientas de nutrición deportiva, hacemos revisiones cada dos semanas para que puedan verse cambios notables. No me preocupa el peso, si estás entrenando puedes bajar de grasa y subir la masa muscular. El peso es relativo, me importan más las medidas.
De todos los nutrientes que se limitan, ¿son las grasas por su aporte calórico uno de los nutrientes más “temidos”?
Hubiese dicho que sí, si estuviésemos en los años 50. Hoy en día, está muy a la par con los hidratos de carbono. Las dietas cetogénicas están muy de moda, por lo que se le ha dado mucho valor a las grasas.
Siguen habiendo muchas dietas hipocalóricas, ya que para la pérdida de grasa se necesita un déficit calórico, pero no se debería quitar nunca ningún macronutriente. A no ser que alguna persona tenga patologías o intolerancias. Se debería jugar con los 3 macronutrientes para que la persona esté saludable.
Los alimentos light o los alimentos 0% están cargados de Marketing. Muchas clientas me preguntan si les voy a poner queso fresco o el yogur 0%. Como nutricionista, recomiendo los lácteos enteros. De lo mejor que tiene la leche, es su grasa, no tiene ningún sentido quitarla. Se digiere más lento y te ayudan a ir al baño.
¿Tienen las mujeres miedo a ingerir grasas?
El miedo es a engordar. La grasa es un macronutriente que tiene 9 calorías por 1 gramos, y el carbohidrato y la proteína 4 calorías por un gramo. El contexto de la persona es esencial, los deportistas y las mujeres necesitan la grasa si o sí.
¿En qué benefician las grasas en el organismo?
Las grasas son un nutriente imprescindible. A nivel cardiovascular son muy beneficiosas. A nivel energético, nuestro cuerpo almacena los carbohidratos en forma de glucógeno, y la grasa como lipocitos. Esto da mucha energía, por lo que beneficia aún más en los periodos de déficit calórico.
Hay que diferenciar las grasas monoinsaturadas, como el AOVE, el aguacate, la soja… y las poliinsaturadas, como las que proceden del pescado azul, todas estas grasas son buenas. Las grasas trans no vienen de productos naturales, por lo que estas no serían las recomendables.
¿Cómo influye un correcto consumo de grasas como el AOVE en el rendimiento físico?
Influye mucho ya que, junto al glucógeno, son una fuente de energía. En la práctica de ejercicio, normalmente y a niveles generales, se suelen utilizar los depósitos de glucógeno del músculo y del hígado. Este depósito siempre es más pequeño que el de grasa. Cuando llevas cierto tiempo entrenando y los depósitos de glucógeno se han agotado, empezamos a utilizar las grasas que tenemos acumuladas, como por ejemplo del abdomen.
Cuando entrenas diariamente, si ese depósito se va agotando, se puede sufrir lo que conocemos como la fatiga crónica del deportista. Esto supone que el deportista se siente cansado siempre que no ingiere grasas.
Las grasas ayudan mucho al cerebro, por lo que influye también en la salud mental. Además, también favorece a la regeneración de la membrana celular y muscular, por lo que si éstas se encuentran flexibles, los nutrientes entrarán más rápido a la célula. Esto para los deportistas es clave, ya que si ingieres carbohidratos te interesa tomar grasa, para que todos los nutrientes entren en la célula y la recuperación sea más rápida.
A nivel intestinal, las grasas son clave en la absorción intestinal de las vitaminas. Las vitaminas liposolubles como la A, la E (un gran antioxidante), la K (ayuda a la coagulación) y la D (muy importante para el sistema inmune). Si no tomas grasas, la correcta metabolización en el intestino es muchísimo peor.
¿Cómo influye la ingesta de grasas a nivel hormonal de las mujeres ?
A nivel hormonal en las mujeres, las grasas nos permiten la creación de hormonas esteroideas. Las cuales, a través del colesterol, se crean estrógenos y progesterona. Si no incluimos un 25%/30% de grasas a través de los alimentos, podemos tener problemas hormonales, como la amenorrea, la piel reseca, el pelo muy seco… La ingesta de grasas saludables es algo básico. Cuando una mujer se quiere quedar embarazada, incrementamos la cantidad de grasas, para que las hormonas funcionen correctamente. Además, ayuda mucho a ir al baño, ya que las grasas ayudan a la fluidez intestinal.
¿Tiene el AOVE efectos antiinflamatorios?
Por supuesto, el AOVE es un antiinflamatorio natural. Tiene más de un 70% de grasas monoinsaturadas, en forma de ácido oleico. Se conoce por la prevención de enfermedades cardiovasculares, y es un producto milenario. Igual que otro tipo de grasas producen reflujo, el AOVE es una grasa que no lo produce. Se utilizaba antaño para regular las digestiones, para curar ulceras de estómago, la vesícula biliar… es un alimento natural, por lo que tiene infinitas propiedades. Para las arterias, tiene muchos beneficios ya que baja el colesterol malo y sube el bueno. Yo recomiendo la dieta mediterránea, unas 3 cucharadas de AOVE diarias, siempre Virgen Extra.
¿Influye la calidad del AOVE respeto a sus beneficios?
Sí, ya que es lo primero que sale de la aceituna. El color verde, si es espeso, la acidez, la pureza… Cuando utilizas Aceite de Oliva Virgen Extra, si no lo llegas a calentar demasiado, no se convierte en trans. En cambio, otro tipo de aceites, como el de girasol, al calentarlo puede convertirse en trans, por lo que serían grasas malas.
¿Habría una ingesta diaria recomendada de grasas?
Depende del contexto de la persona. Nosotros recomendamos un 25/30% de grasas diarias. Hay que tener en cuenta si es una mujer, si es una persona deportista… etc. Cuando hacemos una dieta alta en calorías, las grasas son una buena estrategia para alcanzar ese superávit sin tener que estar comiendo mucha cantidad de carbohidratos, que podría producir hinchazón abdominal.
¿Qué consejo darías a todos aquellos que tienen miedo a ingerir AOVE por “no engordar”?
Las grasas son amigas, no enemigas. En cuanto a la salud, los beneficios son infinitos, ya que te van a ayudar a nivel cardiovascular, a nivel tópico… etc. Una ensalada con tomates, semillas y una cucharadita de AOVE, sería ideal.
Son mucho peor los fritos, los ultraprocesados, los trans… Siempre que un alimento tenga 1,2 o 3 ingredientes, es un alimento real, es una comida buena. Te aporta muchos beneficios. El problema actual es que no nos movemos. Engordamos por la inactividad que tenemos, como subir escaleras, movernos, correr, ir al trabajo andando… Todo esto es lo que afecta de verdad, mucho más que las grasas saludables.
Alimentos como la bollería industrial, o todos aquellos que contentan grasas hidrogenadas, grasas trans… te perjudican mucho más que una grasa que tenga solo un ingrediente como es el AOVE. Siempre en cantidades adecuadas, nosotros recomendamos 3 cucharadas al día. Te las puedes repartir entre el desayuno, la comida y la cena. Siempre te va a ayudar más que perjudicar. Con un plan personalizado y específico como los que hacemos en el centro “Vero Training”, en la Eliana, Valencia.
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